De pronto uno decide quitarle atención a las personas que ya no tienen nada que ver con lo que uno ha decidido ser, y explotan. Comienzan a dar manotazos al aire, emergen los movimientos erráticos, los trastornos de personalidad paranoide, se evidencian las obsesiones, les brota una flor de narciso en la nariz, se transforman en peta zeta y no en una Sailor Scout.
Puedes verles mosqueando por acá, o por allá, por donde puedan meter su nariz florecida porque creen que, la verdad es que no sé en lo que creen, es más: qué estás haciendo aquí? qué hay en mí que te trae a algo tan personal y tan ficticio como mi blog?
Qué tan difícil será entender que alguien no quiera saber de ti porque no le importas, no le interesas, te han dejado de querer y que hay que vivir con eso en la aceptación.
No es bueno ni malo, simplemente ES.
Amigx, acá no es. Amigx date cuenta. La hipervigilancia es insana.
Lo de amigx claro que es ficción, mis vínculos son algo mucho más profundos como para llamarte así.
yo te recomendaría desenchufar el cable y cuando vuelvas a echar andar la máquina te olvides de mi existencia.
Quizá mis palabras te inspiren a sacarte una tirada de cartas del hoyo que diga: preocúpate de las cosas importantes.
Porque honestamente, YO NO SOY IMPORTANTE.
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